El aceite esencial de Lavanda posee un aroma intenso y puro que otorga frescura y paz. Sus tonos de fragancia hacen que la Flor de la Lavanda sea usada en perfumes, jabones y productos de belleza en general. La Lavanda equilibra nuestra conciencia, potencia la intuición y promueve la concentración e inspiración. Asociada a la belleza y el amor, la Lavanda promueve fidelidad y renovación con la pareja así cómo el balance y paz en todo tipo de relaciones. Atrae prosperidad, suerte y bienestar en el hogar. También es asociada con el coraje, creatividad, fertilidad y longevidad.

Esparce mediante un difusor 20-60 minutos antes de acostarte para crear una atmósfera de relajo para dormir mejor. La Lavanda es muy compatible con la Bergamota, Neroli, Pachulí, Rosa y Cedro de Atlas, entre otros, siendo un muy buen complemento de Blends para difusores, lociones, jabones, baños de sal y bombas efervescentes. Su origen se encuentra en la región Mediterránea y es de hojas angostas con tallos verde opacos y flores violetas. En la antigua Grecia y Roma era popular en la preparación de Jabones. A lo largo de Europa, durante la Edad Media, estaba asociada al amor y era usada como afrodisíaco.